Aunque no siempre se le da importancia, los minutos anteriores a comenzar una inmersión pueden marcar una gran diferencia en el buen desarrollo de esta.
Especialmente, si esta preparación para entrar al agua se convierte en momentos de nervios y prisas… Ya sea por falta de costumbre, confianza o tiempo para hacer las cosas con más calma.
Por si este es tu caso, aquí te dejamos una pequeña lista-resumen de puntos a tener en cuenta. Para que entres al agua tranquilo/a, concentrado/a y listo/a para disfrutar.
¡Ponlo en práctica en tu próxima inmersión!
Cómo comenzar correctamente una inmersión: 8 puntos importantes
1 – Relájate un poco
Siempre es una buena idea tomarte unos minutos de relax antes de comenzar a prepararte para ir al agua. Te ayudará a concentrarte en el buceo y a olvidarte de otras preocupaciones que puedas tener en la cabeza.
Si estás algo nervioso, puedes tratar de “visualizar” la inmersión en tu cabeza para sentirte más confiado. Esto te servirá para hacer un pequeño repaso mental de cada paso: equiparte, comprobar tu equipo, entrar al agua, descender… Y también para anticiparte a posibles imprevistos.
También es un buen momento para aprovechar a beber algo o ir al baño. Recuerda que es muy importante mantenerte bien hidratado durante tu jornada de buceo.
2 – Escucha atentamente el briefing previo y comunícate con el guía
Una parte fundamental para que el buceo se desarrolle sin sorpresas es prestar mucha atención al briefing o charla previa a la inmersión, que normalmente explicará el divemaster o instructor.
No te quedes con preguntas si hay algo que no te ha quedado claro o que no se ha explicado expresamente. Como el procedimiento en caso de separación de compañeros o cuándo debes informar al guía sobre tu aire restante.
Informa siempre a tu guía o compañeros si hay algo que te preocupa o con lo que tengas dificultades. Por ejemplo, si necesitas mucho tiempo para compensar, si te suelen dar calambres o si vas a probar una máscara nueva.
Y no seas tímido/a para admitir cuál es tu nivel de experiencia o si no estás cómodo con el plan de la inmersión, pues todos hemos sido principiantes… Además, cualquier buceador experimentado va a saber cuál es “tu nivel” en cuanto te vea en el agua.
Ten en cuenta que cuanta más información tenga el guía sobre ti mejor podrá decidir cómo actuar, por ejemplo, situándose más cerca de ti o cambiando el plan de la inmersión.
3 – Comienza a prepararte con
suficiente tiempo
Acabado el briefing, es importante empezar a prepararse con tiempo y a la vez que los demás. Así no tendrás que hacerlo con prisas y todo el grupo estará listo más o menos a la vez.
Lo ideal es tener el equipo listo, ya montado y comprobado previamente. De esta manera, evitarás cambios de última hora o ir a buscar algo que se te había olvidado, retrasando a los demás.
A nadie le gusta tener que estar un rato esperando a que otro buceador se prepare y, menos aún, con el equipo y el neopreno puesto. Si hace mucho calor puede ser hasta peligroso, así que trata también de vestirte justo antes de entrar al agua.
4 – Equípate de una manera
ordenada y meticulosa
Un buen consejo, especialmente para buceadores menos experimentados, es el equiparse siempre de la misma manera, paso a paso y siguiendo un orden.
Con ello te será más fácil tener todo en su sitio, realizar todas las comprobaciones necesarias y evitar pequeños despistes… ¿Quién no se ha puesto alguna vez el equipo antes que el cinturón? 😀
Además, te recomiendo ser meticuloso con la organización de tus accesorios (linterna, cuchillo, boya…). Si te acostumbras a tenerlos siempre en el mismo lugar te será más fácil encontrarlos cuando los necesites.
5 – Realiza un buen chequeo de seguridad
Pese a que todos aprendemos a realizar el famoso “chequeo entre compañeros” en nuestro Curso de Open Water, no todos los buceadores continúan haciéndolo.
Especialmente cuando uno se siente con más experiencia y piensa que eso es una cosa de principantes… ¡Pero te aseguro que no serías el primero en saltar al agua con una botella cerrada!
Así que mi recomendación es que lo hagas siempre antes de entrar al agua. Además, te servirá para familiarizarte con el equipo de tu compañero.
Sin embargo, ten en cuenta que tú eres el único responsable de tu equipo. Por lo que siempre debes hacer también tu propio chequeo y no depender de tu compañero o guía.
6 – Elige la manera más fácil y segura de entrar al agua
Aunque debes conocer varias maneras de entrar al agua, es importante que elijas la más segura, dependiendo de la embarcación o lugar desde el que entres. O la que se te haya indicado en el briefing, si buceas en el barco de un centro.
Si alguno de los métodos te resulta más difícil, lo ideal es que lo practiques hasta que estés cómodo. Pues, por ejemplo, no es seguro ponerse de pie y realizar una entrada con “paso de gigante” en un barco muy pequeño.
7 – Asegura tu equipo al saltar y hazlo en el momento correcto
A la hora de saltar al agua recuerda sujetar tu equipo adecuadamente. Mucha atención al cinturón de pesos, que podría abrirse, pero también al regulador y a la máscara.
Además, debes prestar atención a la señal de entrar al agua para hacerlo en el momento indicado. Esto es especialmente importante si varios buceadores saltan a la vez, pues es muy peligroso caer encima de un compañero.
8 – Una vez en el agua, haz una pequeña pausa y confirma que estás listo
Recuerda seguir buenos procedimientos también en superficie. Sepárate del barco, comprueba que todo sigue en su sitio y presta atención a tu compañero y al guía.
Tómate unos segundos para una pequeña orientación, por ejemplo, a qué profundidad está el fondo, cuál es la visibilidad o si hay algo de corriente.
Respira, relájate, prepárate para descender…
¡Y a disfrutar! Pues lo mejor comienza ahora…
Y tú, ¿tienes tus pequeñas rutinas o manías antes de entrar al agua?